Busqueda

Siete usos alternativos de la aspirina que no conocías

Todos conocemos sus propiedades para cuando no nos encontramos del todo bien. No obstante, lo cierto es que la aspirina tiene muchos más usos además de los convencionales.

Presta atención, porque este tipo de pastillas que todos tenemos en casa puede servirnos en muchas ocasiones para combatir diferentes problemas.
1- Para combatir el acné
La aspirina, aunque no lo parezca, se puede convertir en el mejor remedio para combatir el acné.
Gracias al efecto antiinflamatorio y cicatrizante que provoca su ingesta, la aspirina ayuda a reducir los brotes acneicos y las impurezas de la piel.




¿Cómo lo hago?
Para usarla, tendrás que mezclarla con jugo de limón.
El resultado será un líquido astringente de lo más poderoso, además de antibacteriano y capaz de eliminar todo tipo de impurezas. De este modo lograrás combatir las bacterias.
Eso sí, recuerda que este remedio solo debes utilizarlo por la noche para evitar la aparición posibles manchas por la exposición al sol.
2- Aliviar el dolor de las picaduras
En ocasiones el dolor de determinadas picaduras puede resultar muy molesto y desesperante. Para aliviarlo de manera rápida y efectiva, podrás recurrir a algo tan sencillo como la aspirina.
Además, se trata de un producto que previene infecciones y desinflama.
¿Cómo lo hago?
Para poder aplicar esta solución solo tendrás que disolver una aspirina en una cucharada de agua y esparcir sobre la picadura en sí.
Notarás cómo la picazón y el dolor van a menos rápidamente, y conseguirás sentirte mejor con una sencilla aspirina.
3- Disminuye las manchas de la piel




¿Tienes manchas y rojeces en tu piel? Con la aspirina podrás disminuirlas de manera notable.
Esta pastilla contiene un ingrediente que se usa en las cremas para aclarar y limpiar la piel, gracias a su efecto exfoliante.
Se trata de una acción que será capaz de reducir las cicatrices y las manchas de la piel.
¿Cómo lo hago?
Para aplicarla tan solo tendrás que mezclarla con 1 cucharada de yogur y una de miel. El resultado será una mascarilla hidratante y reparadora que dejará tu piel perfecta.
4- Previene la aparición de la caspa
Una simple aspirina puede ayudar a que la caspa no aparezca tan rápido, por lo que, además de las evidentes molestias,nos ahorraremos también el componente antiestético que conlleva.
¿Cómo lo hago?
Para combatirla o prevenirla, solo tendrás que lavar tu pelo con dos aspirinas trituradas.
En concreto, tendrás que mezclar las aspirinas machacadas dentro del champú que utilizas usualmente en cada lavado.
Aplícalo con total normalidad, como lo harías en otras ocasiones. Notarás la diferencia en pocos lavados.
5- Elimina las durezas de los pies
Si tienes durezas en los pies, para acabar con ellas puedes optar por una solución hecha a base de aspirina.
¿Cómo lo hago?
Solo tendrás que triturar unas siete aspirinas, añadir media cucharada de jugo de limón y mezclar hasta que se forme una pasta.
A continuación tendrás que aplicarlo en las durezas y cubrir con un paño tibio.
Deja que actúe durante unos diez minutos y luego exfolia las zonas duras con piedra pómez.
Verás como te resulta mucho más sencillo acabar con ellas que si no te hubieras aplicado esta pasta hecha a base de aspirina.
6- Hidrata y repara el cabello dañado
El secador, la plancha del pelo… El cabello se suele dañar por el uso de estos aparatos, pero gracias a la aspirina puedes repararlo de manera eficaz. Si buscas dar salud y brillo a tu melena, ten en cuenta lo siguiente.
¿Cómo lo hago?
Disuelve varias aspirinas en una taza de agua tibia y aplica sobre el cabello limpio.
Olvídate de las cremas para peinar y de los productos a base de aceites, puesto que acabarán engrasando más el pelo.
Deja actuar unos 15 minutos y luego enjuaga con abundante agua.
Notarás las diferencias en ese mismo lavado: tendrás un pelo más sano y fuerte.
7- Acaba con los restos de jabón de la bañera
La aspirina puede acabar con los incómodos restos de jabón que a veces quedan en la bañera.
¿Cómo lo hago?
Para que esto no ocurra nunca más, tendrás que triturar unas 5 aspirinas y agrégalas a la botella del limpiador de baños.
Acto seguido, rocía toda la zona y deja actuar durante una media hora.
Pasado el tiempo indicado solo te quedará proceder a limpiar con un paño.
Notarás cómo todos los restos de jabón tan incómodos y antiestéticos desaparecen, algo que un simple limpiador de baño no habría conseguido.